Los fines de semana son nuestro momento de poder quedarnos un rato más en la cama. No hay apuros para ir al trabajo y tampoco para llevar a los niños al cole (si los tienes). Así que puedes darte el lujo de levantarte más tarde de lo usual, pero solo hasta que el hambre te lo permita. En ese caso, la mejor opción es un brunch.
¿Alguna vez has escuchado la palabra brunch? Seguro que sí. Se trata de la fusión entre el desayuno y el almuerzo. De hecho, su nombre nace de la mezcla de la palabra breakfast (desayuno en inglés) y lunch (almuerzo). Se dice que esta idea surgió a finales de 1800 entre la clase alta británica. Dado que los domingos solía ser el día libre del servicio, estos preparaban en la mañana un bufé con diferentes platos, tanto del desayuno como del almuerzo, para que los señores de la casa se sirvieran a lo largo del día.
Hoy día el brunch no tiene la misma finalidad que en los siglos pasados, pero sí conserva su esencia. Sigue siendo más típico de los domingos y es una comida para quienes se levantan tarde y quieren comer diferentes opciones de comidas deliciosas y sin prisas. El objetivo es más que nada compartir un buen rato tranquilo en compañía de la familia y los amigos.
¿Qué se sirve en un brunch?
El brunch es la comida ideal para cuando es muy tarde para desayunar y muy temprano para almorzar. Y como se trata de una hora imprecisa, en torno a la media mañana, se pueden incluir todo tipo de alimentos, desde dulces como pancakes, muffins, galletas, tostadas francesas y gofres con frutas, hasta salados como tostadas con quesos, bacon crujiente, tortilla francesa, huevos benedictinos, etc. No pueden faltar los batidos, zumos y tampoco una taza de café.
Dado el creciente interés de las personas por esta tendencia, cada vez hay más restaurantes ofreciendo brunch. De hecho, en muchos casos esta comida se ha convertido en el centro del gastromarketing del negocio, sobre todo porque los negocios se las están ingeniando para ofrecer platos que además de ser originales, son muy saludables.
Además, muchos suelen estar adaptados para diferentes públicos: celíacos, vegetarianos, veganos e incluso algunos pueden ofrecer opciones menos saludables con alimentos más grasos para quienes necesitan, por ejemplo, pasar una resaca.
Opciones saludables para un delicioso brunch
Ir de brunch es una gran idea para compartir un rato con los amigos o con la familia. Pero no hace falta ir a un restaurante todo el tiempo, ya que en casa puedes preparar algunas comidas. Lo mejor de todo es que pueden ser muy deliciosas y sanas al mismo tiempo, dejando de lado la bollería o los productos llenos de azúcar. Estas son algunas opciones que te gustarán.
- Tostadas con crema de cacao casera, mermelada casera de frutas, queso vegano huntable o jamón.
- Bizcochos, como el de zanahoria, brownies o galletas caseras.
- Bagels, quiches, huevos escalfados con aguacate, tortitas y crêpes.
- Ensalada de frutas o brochetas de frutas.
- Para la bebida: café, té, batidos, smoothies y zumos.
Una de las mejores cosas del brunch es que puedes combinar los sabores a tu gusto y sin ningún problema. Prueba disfrutar de esta comida un fin de semana y de seguro te encantará tanto la idea que querrás repetirla.
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