Llevábamos tiempo sin compartirte alguna de las últimas tendencias del sector gastro, seguro que ya conoces el brunch, algo así como un desayuno-almuerzo que se realiza durante la mañana. Y ahora, a llegado un nuevo concepto: el Drunch. ¿Sabes de qué se trata? ¡Te lo contamos ahora mismo!

Seguramente te habrá ocurrido que tu madre o abuela en ocasiones adelantaba el horario de la cena y hacía una especie de unión con la merienda. Bueno, lo cierto es que se trata de una opción muy saludable, ya que, al realizar la última comida del día más temprano, nuestro organismo tiene más tiempo de hacer la digestión antes de acostarnos.

En la actualidad, esta costumbre se ha puesto muy popular y es llamada drunch. Sería una especie de brunch pero en vez de fusionarse con las comidas de la mañana, lo hace con las de la tarde-noche.

La palabra drunch es la unión de las dos palabras, dinner y luch, es decir, cena y comida. Pero su concepto va más allá.

Su origen y popularidad

Se trata de una tendencia nacida en Nueva York y que hace un tiempo apareció en Europa, y cada vez está ganando más popularidad.

Esta “merienda-cena” también se ha vuelto el tradicional aperitivo de Italia, que desde hace mucho tiempo es una costumbre cerca de las 7 de la tarde. En otros países europeos como Inglaterra y Francia también se ha vuelto muy popular, sobre todo para disfrutar después del trabajo, en el “after-work”.

En las ciudades más importantes de nuestro país, Madrid y Barcelona, a esta tendencia se le añade además la notable moda de los Roof-Top, donde se organizan drunchs al aire libre, en las terrazas de las edificaciones hoteleras más lujosas de estas ciudades.

Se trata de una idea muy oportuna para juntarse con amistades, después de un largo día de trabajo o durante los fines de semana. Y no se trata de cosa solo de grandes ciudades, puede disfrutarse de un buen drunch en cualquier sitio, en nuestra propia casa, con familia y con amigos.

Tapas y luego una buena copa

Lo más frecuente que puede verse en un drunch suelen ser los platos pequeños, en porciones pensadas para comerse en bocado, como las clásicas tapas o medias raciones.

Es importante saber que se trata de una tradición donde no solo se come, también se bebe. Ya que se da en un horario donde generalmente se sale a tomar alguna cerveza o algún buen vino con amigos.

De aquí la fama que viene ganando el drunch: un momento distendido con una buena fusión de comida y bebida variada, en un sitio ameno, para conversar con quien prefieras.

Organización de un buen drunch

Como hemos comentado con anterioridad, también podemos disfrutar de un buen drunch en casa. Te dejamos algunos consejos sobre cómo organizarlo y que todos queden satisfechos:

En principio, es muy importante que el picoteo sea de elaboraciones sabrosas pero en porciones pequeñas, las opciones son muchas, es cuestión de elegir la que más te guste. Aquí es bueno que haya una buena variedad, para que nadie quede con hambre y pueda optar por comer lo que le plazca.

La bebida debe ir en armonía con los platos, así que presta mucha atención en que la combinación sea una buena fusión que encante a todos.

En cuanto al postre, es opcional pero puedes añadirlo al final al igual que en los brunchs, también servido en platos pequeños para que todo siga el mismo estilo. La idea es que la creatividad vuele y se logre una perfecta combinación que deje felices a todos los invitados.

Juntar dulce con salado

Si quieres ser anfitriona o anfitrión de un perfecto drunch y deseas saber lo que podrías ofrecer a tus invitados, aquí te presentamos algunas opciones:

  • Sándwiches.
  • Canapés.
  • Brochetas.
  • Tapas.

Dirás: ¿y estas mezcolanza de comidas?. Es que se eso se trata el drunch… experimentar un poco y que la idea principal sea picotear, pero que siempre se trate de platos con mucho sabor y originales. Lo importante es salir de las comidas rutinarias y disfrutar de un momento que además de llenar nuestra barriga sea distendido para pasar el mejor de los ratos con nuestras amistades.

¿Qué bebida elegir?

Siempre es bueno detenerse en las bebidas que optaremos en cualquier comida, ya que es uno de los elementos que acompañarán la velada. En el drunch, las protagonistas son las bebidas alcohólicas (cabe mencionar que muchos sostienen que la “d” de drunch viene en realidad de la palabra “drinks”).

Las bebidas pueden ser muchas. Desde cervezas y vinos hasta unos buenos mojitos o gin-tonics. Todo depende del gusto de cada uno, pero se puede ser muy flexible en el momento de elegir.

Perfecta opción “after-work”

Gran parte de la popularidad que ha ganado el drunch es por tratarse de una tradición ideal para un “after-work”. Todo está dado para convertirse en un momento grato para compartir con compañeros del trabajo o amistades después de una jornada laboral agotadora, para relajarnos un poco y dejar por un rato las responsabilidades de lado.

Lo cierto es que el drunch parece haber llegado para quedarse ¡así que no te quedes atrás y disfruta de compartir una tarde-noche con un toque especial!

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