principales errores a la hora de emplatar

El marketing digital se preocupa por la experiencia real de los usuarios. Quienes disfrutan más y perciben mejor los sabores de una comida cuando la presentación de platos es cuidada. Por eso, nos tomamos el tiempo de recopilar cuáles son los principales errores que debes evitar a la hora de emplatar las comidas de tu restaurante. 

Errores en la presentación de platos

La mitad de datos que procesan las zonas cerebrales de modo sensorial proceden de la vista. Así que trabajar el emplatado en los restaurantes es tan importante como cualquier otra estrategia de marketing digital. Para ello, evita estos errores: 

  • Restar importancia a la vajilla

En la presentación de platos, la vajilla representa un papel vital para conseguir la conexión entre la comida y el comensal. 

Por tanto, debes prestar atención al tamaño del plato, que ha de estar proporcionado en relación a la cantidad de comida y a la forma del mismo. Lo más recomendable es hacer el emplatado en vajillas redondas. Y también debes considerar el color de los platos, lo mejor es recurrir al color blanco para mantener la elegancia, aunque el negro en locales muy modernos también está a la vanguardia. 

  • Agregar elementos que no guardan relación con la comida

La presentación de platos es un valor agregado para los restaurantes, el solo hecho de provocar en el comensal una conexión que lo lleve a tener una grata experiencia, es una buena estrategia de gastromarketing.

Sin embargo, la incorporación de elementos solo por “elevar” la estética del plato no está justificada si estos no suman al conjunto de la comida. Por ejemplo, las flores podrían aportarle más estética, pero si no son orgánicas aptas para consumo no suman. 

Si deseas agregar un poco de color, busca qué ingrediente puede integrarse de manera armónica a la comida sin que pierda el gusto. 

  • Obviar la limpieza del plato

En los restaurantes, mantener las normas de higiene y bromatología es necesario para evitar la propagación de infecciones por mala praxis. Además, un plato sucio y descuidado resta belleza y gusto a la comida.

Así que antes del servicio, asegúrate de que todos los platos estén limpios y cuidados, repasándolos con una toalla humedecida en un poco de alcohol (ginebra, ron…) para eliminar resto de grasas o las comunes huella de dedos. 

Evita improvisar en la presentación de platos, cuida las técnicas de cocción, haz el emplatado cuidando el volumen de la comida y, apuesta por la simpleza, menos es más.

¿Te gustó el Post?
[Total: 0 Promedio: 0]
Comparte este post ;)

Sección de Comentarios

Deja tu comentario aquí

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *