El café, la tendencia que nunca pasa de moda

El mundo del café lo tiene todo para triunfar en términos de marketing. Es un ingrediente sencillo, con historia, disponible en multitud de formatos y sabores, con una personalidad y cultura propia. El café es un auténtico objeto de deseo tanto para los que los disfrutan como un ritual social como para los que lo usan como antídoto para resucitar los lunes por la mañana. 

Pocos ingredientes son capaces de unir a tantas culturas en el mundo y de hacernos conocer tanto tipos de elaboraciones y matices. Espresso con agua fría en Italia; en vaso grande, para llevar y con mucha leche en Seattle, la cuna de Starbucks;  preparado en arena caliente al estilo turco y bosnio; o a modo de goteo e infusión, como el de Vietnam. El café es un ingrediente y un ritual gastronómico ideal para encontrar la famosa conexión emocional entre consumidor o producto. 

Esto es algo que saben bien las grandes marcas de café, pero que también ofrece grandes posibilidades a los productores y cafeterías independientes. Sabores, texturas, matices, presentaciones dignas de Instagram, cafeteras de colección y todo un mundo de pasión por el  café rodean a un increíble producto que nunca pasa de moda. ¿Qué es lo que tiene para ser siempre tendencia?

Café y marketing: cómo destacar frente a la competencia

En redes sociales, en catas personalizadas, con increíbles packagings o con los aromas a los que solo un buen barista sabe sacar partido. El café es uno de los productos que mejor funcionan cuando de marketing se trata. Sin embargo, la cantidad de marcas, tiendas especializadas y cafeterías es abismal. Por eso, es necesario recurrir a las técnicas adecuadas para destacar y seguir siendo tendencia. 

En WEKOOK Marketing llevamos años trabajando como expertos  y observando esta tendencia que nunca cesa. Es así cómo hemos conseguido desengranar las claves de un producto que no pasa de moda y cuyas marcas destacan precisamente por las siguientes razones:

Producto original

Al igual que hizo Nespresso en su día con el lanzamiento de las cápsulas o, de la misma forma que entendemos lo especial que puede ser un café de Etiopía, en el mundo de la cafeína es importante dar con un producto único que te haga diferente. Lo mismo ocurre también con los establecimientos, que no solo están obligados a ofrecer un ambiente agradable y “cafetero”, sino que tienen que aportar un punto de vista y una personalidad única que invite a los clientes a disfrutar su tiempo libre en el establecimiento.

Equilibrio entre tradición e innovación

El mundo del café está en constante cambio, una razón que quizás explique por qué nunca pasa de moda. No obstante, no debemos olvidar que la esencia del café es muy sencilla y tradicional, algo que debe reflejarse también a través de la marca o de los procesos que llevan a cabo los baristas. Es importante no pecar de innovadores -como aquellos que decidieron servir lattes en cáscaras de aguacate– y mantener toda la esencia de un producto que es casi perfecto.

Opciones para expertos y simples amantes del café

Cuanto más abiertos seamos con el tipo de público al que nos dirigimos, más éxito tendrá nuestra marca de café o cafetería. De nada sirve comercializar un café astringente o especialmente ácido, si luego nuestro consumidor es más propenso a tomar un cortado suave antes de entrar en la oficina. Ocurre lo mismo con los rangos de precio, sobre todo si decidimos incorporar un café de autor entre un público nada dispuesto a pagar hasta 6€ por un solo espresso.

Look & Feel

La iconografía en torno al café es inmensa y muy rica. Tiene personalidad propia y en ella se detectan siempre símbolos de identidad, como los granos de café, el humo que sale de la bebida caliente y los diferentes tipos de taza en los que se consume. Destacar con una imagen que inspire, a través del packaging y del look & feel de la web, las redes sociales y los diferentes canales de marketing digital siempre va a hacer que tu marca gane reconocimiento.

Entender el café como una experiencia

El café no es una simple bebida, sino que es un viaje a través de toda una cultura milenaria. Su disfrute se produce a través de todos los sentidos, con aromas que conquistan, presentaciones cuidadas, tazas pensadas para cada tipo de elaboración y texturas aptas para cualquier tipo de paladar. Entender esto es fundamental para generar acciones de marketing adecuadas y poder dar a los clientes precisamente aquello que buscan cuando se acercan a este mundo gastronómico.

Más allá de la pantalla

El café y las redes sociales forman una pareja casi perfecta. Sus múltiples posibilidades creativas, unidas a los guiños, memes y momentos de inspiración del mundo influencer hacen que esté más presente que nunca en internet. Incluso, creadores de contenido han decidido ir un paso más allá y crear sus propias marcas de café, como Carlos Ríos, o inaugurar cafeterías con mucha personalidad, como la que tiene en mente Marta Riumbau. No obstante, en la línea de entender el café como una experiencia, también es importante ser capaz de sacarlo de la pantalla y compaginar la estrategia de marketing con acciones offline. El café es un ritual en el que las sensaciones y los momentos de reunión son fundamentales. Una estrategia de éxito deberá mantener un equilibrio adecuado entre entorno online y offline para sacar todo el provecho que este producto puede dar de sí.

¿Es tu caso? Si tienes una empresa de cafés, una cafetería o una idea en torno al café a la le que veas todo el potencial, estaremos encantados de ayudarte a darle forma con la estrategia de marketing adecuada. ¡Contacta con WEKOOK!